Fielmente creo en que la gente debería hacer lo que le de la gana con su vida privada, o qué sé yo, su cuerpo, su mente como quieran decirle...
Pero es difícil a veces estar al día con todos estos cambios que se hacen las personas y las denominaciones de los resultados de estos cambios. Por ejemplo, tenemos a los hetero y homosexuales, que se dividen en dos: lesbianas y 'gays'. Pero una mujer gay es una lesbiana, ¿no? Bueno, hay hombres que se visten de mujer, pero aún así no les atraen los hombres, sólo la idea de chingarse la vida poniéndose tacones (mae, esa es una vara tuanis de ser hombre, NO TACONES. ¡Jelou!). Hay hombres que se visten de mujer o se hacen una cirugía para cambiar su sexo y sí les gustan los hombres. ¿Eso es ser, oficialmente, homosexual?
Creo que al final del día, después de todos estos cambios, igual van a terminar emparejados: los que tienen aparato femenino con los que tienen aparato masculino. Sin importar lo que tenían entre las piernas cuando nacieron.
Y todo esto porque el/la hijo/a (ven, ahí empieza mi enredo) de Cher y del fallecido cantante Sonny Bono, va a realizarse una operación de reasignación de genero. O sea, que nació como niña, llamada Chastity (Castidad, o sea, diay mi mama ¿qué más esperaba?) y pronto será mae, llamado Chaz. Los que se realizan esta cirugía entonces son transexuales. Igual, sigo bateada.
E informan que todo este maravilloso proceso podrá ser visto eeeeeennnnnn... adivinen... un 'rialiti chou'. Ay si mi día tuviera más horas para verlos todos...
A mi, de carajilla no me gustaba vestirme 'como niña' porque era sumamente incómodo, pero no necesariamente porque me quería vestir como chiquito. No me gustaba jugar cosas de chiquita, ni con muñecas ni con maquillaje, pero no necesariamente porque quería ser un 'varoncito'. Actuar como chiquita era limitarme a hacer todo aquello que no me levantara las enaguas... no sea perro. Pero por dicha, mi mamá me dejó ser como me dio la gana y siempre disfruté ser mujer. Claro, una que se apuntaba a todas las varas con los carajillos.
Y pienso que si me hubieran dicho, 'No, usted es niña, tiene que comportarse, vestirse, reírse, hablar, opinar, callarse, aburrirse, servir, atender, limitarse como señorita' ya estaría haciendo fila para el quirófano también. Así que gracias a mi querida madre, por no encasillarme ni tratar de hacerme actuar como indicaban las normas sociales... si no tendría tres varoncitos y no dos.
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